Réquiem a una guitarra huérfana

Tu guitarra ya no canta a las lunas,

tus cuerdas están ahora huérfanas.

Hay un espacio sin su serafín

donde las alegrías esperaran sin ti.

Y que le diré a los escenarios?

Cuando pregunten por tus pasos

Y a los oídos que me exijan por tu voz

tus melodías y tus sueños.

Diré que estas creando la canción más grande del mundo

un bolerito de sal

Que endulzara  los corazones    

y seguirás escribiendo en nuestras almas.

Hasta luego artistas, soñador, compañero  

Patricio Zefla